Materiales:
- botellas de plástico;
- grapas para grapadora de papelería;
- remaches ciegos.
Proceso de fabricación de material para techos.
La tecnología propuesta implica la producción de un techo ondulado similar a la pizarra o la ondulina. Para que quede bastante limpio, es recomendable utilizar botellas de PET idénticas. Como último recurso, puedes clasificarlos y usar botellas idénticas para hacer una ola.
Para hacer material para techos, debe cortar de manera uniforme y precisa los fondos y las macetas de las botellas.
Luego, los cilindros restantes se cortan a lo largo en 2 ondas.
Habiendo preparado una cantidad suficiente de mitades de botellas, es necesario conectarlas en ondas largas. Para ello, se pliegan con una superposición de varios centímetros.En los laterales, sus paredes dobles están unidas por ménsulas. Para ello se utiliza una grapadora de escritorio. Cada conexión utiliza 2 grapas. De esta forma se van construyendo las mitades hasta obtener una onda larga igual a la pendiente del tejado.
Habiendo preparado una cantidad suficiente de ondas, es necesario conectarlas. Para ello, se aplican paralelos entre sí. En este caso, una onda debe girarse hacia afuera y la segunda hacia adentro. Juntos parecen repetir el relieve de pizarra. Después de colocar las ondas es necesario conectarlas. Para hacer esto, se funden agujeros con un soldador caliente y las tiras adyacentes se juntan con remaches.
El techo, tras unir las lamas con remaches, queda de un solo contorno. Esto permite colocarlo sobre el revestimiento con un paso amplio entre los topes.
Esta es una cualidad muy importante para proteger un invernadero o construir una marquesina para la lluvia, ya que el fino revestimiento minimiza la pérdida de luz solar. Otra ventaja del material, además de la transparencia y la libertad, es la facilidad de instalación en biseles complejos. Es fácil de recortar y doblar. Debido a la elasticidad de la onda, en algunos lugares puede expandirse o estrecharse. Puede unir fácilmente láminas de tejado con diferentes direcciones de onda. Lo principal es asegurarse de que durante la instalación haya una pendiente suficiente para que el flujo de agua no se estanque en el centro, lo que inevitablemente provocará una fuga.