Necesitaremos:
- cuentas de cualquier color;
- hilo de pescar fino;
- tijeras;
- aguja para cuentas;
- cierre;
- callots-conchas con un lazo para engarzar los extremos del hilo de pescar;
- un encendedor o cerillas (para prender fuego a los extremos del hilo de pescar antes de prensarlo con un callot).
Primero recogemos un hilo largo de cuentas, cuanto más largo sea, más grueso quedará el collar al final. Es recomendable ganar desde 4 metros y medio hasta 6 y medio.
A continuación atamos ambos extremos del hilo de cuentas, lo sujetamos, lo cortamos y quemamos los extremos.
Dobla el hilo de cuentas para obtener 10 hilos (si has recolectado más de 5 metros de cuentas, debes doblarlas en 12 o 14 hilos, si necesitas hacer el collar más magnífico, si lo necesitas más largo, dejar 10 hilos).
Atamos los extremos del collar con hilo de pescar en el pliegue para poder colocar el cierre.
Colocamos los callots, volvemos a hacer un nudo para asegurar el callot (también puedes usar dos o tres nudos, para mayor fuerza), luego prendimos fuego a los extremos y los escondemos dentro del callot. Sujetamos las mitades para que los extremos del hilo de pescar queden dentro de la bola. No aprietes todavía el anillo en cada callot.
Ponemos el cierre y sujetamos las anillas en los callots. Lo mejor es utilizar un cierre que gire, ya que nuestro collar también quedará un poco torcido.
Giramos el collar en el sentido de las agujas del reloj, desabrochándolo para no romper el cierre. Esta manipulación ayudará a darle elegancia al collar y parecerá que está elaborado mediante una técnica compleja.
Este collar se puede usar de dos maneras: sin torcer, suelto o torcido.
¡Feliz elaboración!
